¿Qué palabra
te dijera
que llegue a tu corazón
con la fuerza que al enfermo
lleva la Muerte su voz,
reinando sobre lo humano
y toda la creación?
Cuando yo la modulaba
solo pensaba en tu amor,
de manera que mi orilla
con la tuya se juntó,
y fue tan vivo el recuerdo
que mi alma se dibujó.
Mariposa que dormía
tranquila dentro de mí,
se despertó de repente
queriéndoseme salir
por todos los caminitos
de mi cerebro sin fin.
Como no tengo palabra
que aclare mi corazón,
te mandaré por el aire
el eco de mi canción;
en ella va dibujada
la forma de mi pasión.
que llegue a tu corazón
con la fuerza que al enfermo
lleva la Muerte su voz,
reinando sobre lo humano
y toda la creación?
Cuando yo la modulaba
solo pensaba en tu amor,
de manera que mi orilla
con la tuya se juntó,
y fue tan vivo el recuerdo
que mi alma se dibujó.
Mariposa que dormía
tranquila dentro de mí,
se despertó de repente
queriéndoseme salir
por todos los caminitos
de mi cerebro sin fin.
Como no tengo palabra
que aclare mi corazón,
te mandaré por el aire
el eco de mi canción;
en ella va dibujada
la forma de mi pasión.
Violeta
Parra, Chile
Isabel
Parra, hija de Violeta y acompañada por su sobrina en la guitarra nos canta
esta hermosa canción llena de metáforas, compuesta por su madre la gran poeta
chilena de los años 60. Si alguna vez han leído sus poemas y canciones notaran
la gran capacidad de Violeta para escribir con palabras los profundos mensajes
de su corazón, un gran estilo para alguien que no tuvo mucha educación y que la
vida y el destino nunca estuvieron a su favor.